Centro Láak'in SC

¿Alguna vez te has dado cuenta de que en tu familia pasan cosas muy similares entre una generación y otra? ¿Crees que sea simple casualidad?

Desde mi vivencia lo que te puedo compartir es que en varias ocasiones había hecho mi árbol genealógico con el mero objetivo de identificar los nombres de mis antepasados pero no había logrado integrar la información, esto  fue cambiando durante mi formación en psicología cuando un maestro nos habló sobre la importancia que tiene el obtener información de otras generaciones para el proceso terapéutico fue entonces cuando comencé a darme cuenta que algunas cosas de mi vida ya habían sido vividas por mis antepasados y  también entendí que algunas situaciones de su vida matizaban la mía. Descubrí por ejemplo mi patrón en la maternidad; mi hijo nació cuando yo tenía 27 años, yo nací a los 27 de mi madre y ella a los 27 de mi abuela, ¿Casualidad?

Cuando hacemos nuestro árbol, nos damos la oportunidad de descubrir aquella herencia generacional que forma parte de nuestro ser y que repercute en cualquier ámbito de nuestra vida pudiendo ser la profesión, la forma de relacionarnos con las personas o con la economía, las enfermedades, los nacimientos, los cambios de residencia e incluso la muerte.

Freud proponía que: “el proceso más importante era hacer consciente lo inconsciente” (darte cuenta) y en parte es lo que se hace cuando trabajamos con el árbol, tomar conciencia de nuestra historia transgeneracional para entonces poder hacer un cambio.

Toma unos minutos y piensa en un tema que te genere conflicto, quizás las relaciones de pareja o tu relación con el dinero ¿Cómo habrán vivido tus antepasados este tema? ¿Identificas algún patrón o crees que es solo coincidencia? 

Te invito a profundizar en tu árbol, acércate a tu familia para que obtengas información y puedas identificar algunas cosas de tu presente en el pasado.